Una escena steampunk ambientada en una ciudad industrial en ruinas. El suelo está cubierto de escombros y piedras esparcidas, evidencia de destrucción y abandono. Altos edificios de arquitectura antigua, construidos en materiales oscuros y desgastados, se alzan a los lados, con numerosas chimeneas metálicas que expulsan gruesas columnas de humo negro, oscureciendo el cielo nublado y creando una atmósfera densa, gris y opresiva. En el centro de la imagen se encuentra una mujer imponente y carismática, vestida con un traje steampunk de alta costura en tonos negros y dorados, lleno de detalles elaborados. Lleva un sombrero de copa alta decorado con engranajes dorados, relojes de bolsillo y gafas de aviador sobre el ala. Su chaqueta de cuero entallada tiene un diseño militar con botones dorados y un cinturón ancho adornado con bolsillos pequeños y elementos metálicos. Viste shorts de cuero negro combinados con medias de liga visibles y botas altas de cuero negro ajustadas con hebillas doradas. Un abrigo largo de vuelo amplio y forro de terciopelo decorado se despliega dramáticamente con el viento. Como accesorios lleva guantes oscuros y un lazo dorado en el cuello, rematado con un broche mecánico. Su postura es decidida y dominante: de pie, con una pierna adelantada y el brazo derecho extendido señalando firmemente fuera de la imagen, transmitiendo autoridad, liderazgo y determinación. Su expresión es serena pero firme, con una mirada directa y desafiante. Su cabello negro y suelto se agita con el viento, aportando una sensación de libertad y rebeldía. Estilo artístico: realismo detallado con enfoque steampunk, inspiraciones de arte concept art cinematográfico. Iluminación: luz tenue y difusa filtrándose a través del humo, tonos grises, ocres y dorados, resaltando los detalles metálicos y el dramatismo de la escena. Atmosfera: intensa, opresiva pero heroica, transmitiendo sensaciones de aventura, fuerza y resiliencia en un mundo distópico.